Decididos a detener la amenaza de raíz, Sireno Man, Chico Percebe y Jack se dirigieron al centro del campus, donde las señales de la niebla tóxica eran más intensas.
"Debe estar cerca," dijo Sireno Man mientras observaba el ambiente con atención. "Los villanos siempre buscan lugares elevados para hacer sus discursos malvados."
Jack olfateó el aire y detectó un fuerte olor a algas putrefactas que los guió hacia la torre del reloj. Al subir las escaleras, encontraron una enorme puerta metálica con un teclado numérico.
"¡Es un código de seguridad!" exclamó Chico Percebe. "Debemos encontrar la clave para entrar."